Cuando visitas Países Árabes algo que llama especial atención a las mujeres occidentales es la forma en que la mujer árabe embellece su cuerpo con tatuajes hechos con un tinte llamado Henna. Este tinte proviene de una planta llamada alquena. La alquena es una planta grande de flores blancas, pequeñas y olorosas, que crecen en climas cálidos como los de los países norte africanos como Marruecos o algunos de asiáticos como la India o China.
De esta planta se extraen las hojas, se dejan secar y se trituran hasta convertirlas en un polvo fino que es el que se utiliza para teñir. El nombre de Henna proviene de Árabe hinna.
Este tinte que tanto se utiliza para teñir ropa, piel o cabello, está muy arralado a la cultura de muchos países, uno de los cuales es Marruecos.
En Marruecos la henna se utiliza en muchas ocasiones, pero una de las ocasiones más especiales es el primer día de boda. El primer día del casamiento marroquí es el día de la Henna y las mujeres se encuentran con la novia, la cual después de haberse lavado con flores de la alquena, la novia es atendida por una “hannaya o nakacha” y le tatúa manos y pies de henna con diseños más o menos complicados.
La henna simboliza la purificación y es señal de buenos augurios para la boda, renunciar a esta práctica es un desafío a la cultura y las tradiciones, y por eso muchas mujeres invitadas a la boda también van tatuadas.
La aplicación de este tinte natural es muy sencilla, se prepara picando las hojas en un mortero y añadiendo un poco de agua y ya se puede aplicar sobre la piel, y se deja secar y después se retira la pasta. El tinte queda impregnando en la piel durante unas dos o tres semanas, dependiendo del tipo de piel.
Hay que tener en cuenta que el color natural de la henna es el color rojizo, pero según su procedencia el tinte tiene sus matices. La de India, especialmente la de la zona de Rajastán suelen tener tonos más rojizos; la del sur suele ser más marrón siena, la yemení y marroquí tienden a tonos marrones muy oscuros y eso se debe a la aridez de la zona en la que se cosecha. y que para hacer variedades más oscuras, estas se hacen mezclando henna natural con productos químicos, consiguiendo este color negro característico, aunque también alguna que otra vez puede producir algunas reacciones cutáneas al establecer contacto con la piel.
Pero la henna también tiene otras aplicaciones más beneficiosas ya que es buena como anti-hongos, como conservante de cueros y telas y como repelente de algunos insectos. Sus flores se han utilizado para crear perfumes desde la antigüedad.